Se trata de una adolescente cajamarquina de 14 años quién estuvo tres años conectada a una máquina de hemodiálisis, pero su padre le regaló una segunda oportunidad.
Kiara Dajhana es una adolescente de 14 años que estuvo conectada a una máquina de hemodiálisis durante tres años. Gracias a su padre, la menor tuvo una segunda oportunidad de vida, pues le donó uno sus riñones como un emotivo acto de amor. Este trasplante renal se realizó en el Instituto Nacional de Salud del Niño, en San Borja, convirtiendo así a esta Semana Santa en un momento de esperanza para la familia.
El trasplante se realizó el 5 de abril y fue llevado a cabo por un equipo multidisciplinario en el INSN San Borja. La rápida recuperación de Kiara ha llenado de alegría y esperanza a su familia en Semana Santa. Asimismo, expresan su gratitud por la atención médica recibida y el apoyo del Fondo Intangible de Salud (Fissal) del Ministerio de Salud).
La madre de Kiara, Elvia Bustamante, compartió la angustia que vivió al ver a su hija luchar por su vida: “Mi hija estuvo un año en lista de espera. Nos llamaron para un operativo porque se presentó un donante cadavérico, pero no fue compatible. No queríamos ver sufrir a nuestra hija y mi esposo decidió donar uno de sus riñones para darle una nueva oportunidad de llevar una vida normal”, relató.
La decisión de José Guevara, el padre de la adolescente, significó un acto de amor que no solo salvó la vida de su hija, sino que también resalta la importancia de la donación de órganos. Al respecto, la directora general del INSN San Borja, la Dra. Zulema Tomás Gonzales, enfatizó la necesidad de fomentar la donación, especialmente en estas fechas significativas. “Con esta decisión estamos salvando la vida de más niños”, afirmó la directora.