Después de múltiples casos de intoxicación en escolares a nivel nacional, el Programa Nacional de Alimentación Escolar Comunitaria Wasi Mikuna ha dispuesto la suspensión inmediata del consumo de conservas de pescado, pollo y pavita, como medida preventiva. Según el comunicado oficial, la decisión busca priorizar la salud de más de 4.2 millones de estudiantes.
Sin embargo, esta medida evidencia la falta de control y la improvisación del actual régimen, que no ha sido capaz de garantizar un servicio alimentario seguro. El gobierno de Dina Boluarte, con su gestión errática y autoritaria, no solo ha fallado en la administración del país, sino también en lo más básico: proteger la salud de los niños.